jueves, 1 de agosto de 2013

El Gato Piji en busca del Marisco Gallego


Día 1 Córdoba - Madrid
Salida de Córdoba a las 08:00 h. destino a Madrid. La ruta, la de siempre, A-4 dirección a la Capital de España.


Pero esta vez lo que echamos de menos fue pasar por Despeñaperros, esas curvas que en moto siempre se agradecen y hacen el viaje más entretenido.

Llegamos a Madrid y empezó a notarse la calor, pero por suerte ya estábamos en casa para comer y echarnos una siestecilla que nos ayudó a escapar de ella.


A las 21:30 h. quedamos con nuestros amigos egipcios (EVA y ERNESTO), que supuestamente nos iban a enseñar la barriga donde se encontraba Inés, pero la cosa cambió.
Esperando en el Pardo, tomando un refresquillo frente a la iglesia, recibimos un aviso de Ernesto buscando la escusa más buena que me han dado para no quedar conmigo, jejeje. Nos dijo que Inés también quería venir, así que se fueron al hospital de La Paz.


Con esos cambios de planes nos volvíamos para casa y pasando por Montecarmelo nos paramos en el Restaurante FOREMAN. Aquí os dejamos algunas cosillas que probamos.




Después de la cena nos dirigimos para casita y preparar el viaje a Galicia.

Día 2 Madrid - Ferrol
Después de la alegría que nos dieron Eva y Ernesto, nos levantamos y montamos las maletas en la moto para comenzar el camino hacia Galicia Calidade.

Salimos de Madrid en dirección a la A-6 sentido Coruña. A la altura de Guadarrama tomamos la N-VI para disfrutar un poco de las carreteras de verdad que hay en España.


Pero al llegar a Adanero la N-VI se convierte en la A-6 la cual seguimos hasta Betanzos donde nos desviamos hacia Ferrol por la AP-9. Pero se puede volver a retomar la N-VI a la altura de Benavente. (Nosotros no lo hicimos porque íbamos con prisas ya que las nubes nos querían mojar).
Antes de llegar a Ferrol tomamos la salida a Xubia donde nos hospedamos en el Hotel Marcial.
Del cual tengo que decir que los dueños son muy amables y de que la habitación está muy bien. Pero el único pero que le puedo poner es el fuerte olor que tenía a tabaco. Por lo demás todo bien.


Tras comer en el restaurante FERROLTERRA y matar el gusanillo que teníamos, retomamos la moto para visitar Ferrol. Donde dimos un pequeño paseo y visitamos la zona más turística.





 
Comenzamos la visita en la Plaza de Armas visitando el Ayuntamiento para solicitar unos mapas que nos hicieran más fácil el encontrar las zonas a visitar.



Desde allí nos adentramos en el barrio de la Magdalena, donde se encuentra la zona peatonal con sus tiendas. Llegamos hasta la Plaza de Amboaxe.


A continuación nos dirigimos hacia el Ferrol Vello, pasando primero por el mirador que se encuentra junto al Parador. Desde el cual vimos el Arsenal Militar y un mercadillo medieval donde encontramos a la primera Meiga de las muchas que encontraremos en Galicia.






Y volvimos a salir corriendo hacía el hotel, porque trás los amagos de agua que sufríamos durante nuestro paseo, empezó a llover para mojarnos, ya que no nos llevamos los chubasqueros.


Día 3 Coruña - Arteixo -Caión - Carballo

Nos levantamos y nos dirigimos a visitar La Coruña. Salimos de Xuvia en dirección del Ferrol, para evitar la AP-9 con dirección a La Coruña.


Una vez en el Ferrol tomamos la N-651, una carretera que va pasando por varios pueblos y que merece la pena ya que vas bordeando la costa. Ya que vamos en moto y hay que disfrutar del paisaje y de las carreteras reviradas, aunque la velocidad no es muy elevada por varias razones, primero por el paisaje y segundo por la circulación de los vehículos de los lugareños. Otra cosa que te llamará la atención son las casas que vas encontrando durante toda la ruta.



Pasamos por el puente de Pontedeume que es una maravilla el paisaje y las vistas que hay. Hablando con un Municipal de Arteixo, nos recomendó que hiciéramos una parada en Pontedeume porque dice que merece la pena.



Más adelante tomamos la N-VI en dirección a La Coruña, pasando por O Carballo, que no tiene nada que ver con el pueblo de Carballo.
Una vez llegados a La Coruña, nos llamó la atención el puerto tan grande que tiene y los edificios.



Lo bueno que tienen las ciudades grandes como La Coruña y el verano, es que siempre hay algo que llama la atención. Coincidimos con un grupo de vehículos históricos que alegraron la vista de la gente que se encontraba en la Plaza de María Pita.




Tras aparcar la moto en la zona del casco antiguo, otras de las ventajas que tiene de viajar con moto, nos adentramos en el casco antiguo y paseamos por sus calles, viendo la arquitectura de los edificios y las curiosidades que se pueden ver en una gran ciudad.




Y nos encontramos con una recreación de varios cuerpos militares durante la historia. Desde los Romanos, pasando por las Tropas Napoleónicas hasta soldados de la segunda guerra mundial.











Continuando nuestra visita y cómo no, de la Coruña hay varias cosas que no se pueden dejar de visitar. Lo primero la Torre de Hercules, segundo la Playa de Riazor junto al estadio y por último el Monte de San Pedro.



Este último muy recomendado para los padres con niños, ya que hay una amplia zona de recreo para que éstos jueguen, los niños jejeje, y tienen hasta un pequeño laberinto en el cual los mayores hacen de las suyas.



Al Monte de San Pedro hay varias formas de subir: andando, en bici, en coche o subiendo en una bola futurista con vistas al mar, que seguramente a los niños le va a gustar.


Una vez visitada la Coruña nos dirigimos a Arteixo tomando la Avenida que tiene el mismo nombre, pero cuidado porque las indicaciones desaparecen y hay que tomar dirección a Carballo, lo digo por experiencia después de dar un par de vueltas jejeje. Bueno continuamos por la AC-552 en dirección de Arteixo.

Una vez en Arteixo, coincidimos con el mercadillo y como la oficina de información estaba cerrada, aprovechamos para preguntar a gente del lugar qué es lo que había para visitar. Pero nos dijeron que el pueblo es famoso por los almacenes de INDITEX (más conocida como ZARA) y nos recomendaron ir a comer aun restaurante del pueblo donde comimos productos de la tierra. Un poco de pulpo y un Churrasco de Ternera.

Tras la comida nos dirigimos a Caión, un pequeño pueblo pesquero que fue famoso durante la época del Prestige. Para llegar al mismo tomamos la carretera de Caión (CP-0514 según San Google).


 Desde Caión tomamos dirección a Carballo por la carretera con el mismo nombre o CP-10909. La verdad que las vistas de la Costa da Morte es una pasada.











En Carballo la verdad que vimos poco, nos tomamos un café y nos volvimos otra vez a Xuvia para preparar la salida del día siguiente y para dar un vuelta por la noche ya que es sábado y queríamos ver el ambiente festivo de la zona.
La vuelta la hicimos por la AC-552 hasta La Coruña y desde allí el mismo camino de vuelta que tomamos desde Xuvia.








Como todo viaje hay cosas curiosas que sólo se ven en una zona concreta de la geografía de España y aquí en Galicia son los Orrios y los grupos de música con sus trajes típicos y gaitas.


Bueno una vez duchados nos dimos una vuelta para ver el ambiente y más que ambiente lo que vimos son casas de películas de miedo. Y para no variar y sin ganas de comer picamos algo antes de irnos a dormir.




Dia 4 Ribadeo - Playa de las catedrales - Foz - Finca Galea 

Comienza el día y nos dirigimos hacia Ribadeo. Tomamos dirección a Ferrol para posteriormente buscar la autovía que se dirige a Oviedo. Primero tomamos la AG-64 dirección Vilalba y ahí tomamos la A-8 o Autovía del Cantábrico. Pero antes de llegar a Mondoñedo nos desviaron a la N-643 ya que la autovía está en ese punto en obras. El motivo de coger la Autovía fue para llegar pronto a Ribadeo para informarnos de los horarios de las mareas, ya que queríamos visitar la Playa de las Catedrales. Lugar de visita obligada.

Bueno durante el viaje encontramos la fábrica de hacer nubes que tienen en Galicia. Que no os engañen que el tiempo es como en todos lados pero ellos tienen la NUBEITOR o máquina de Nubes.


De todos modos nos pilló una niebla que no se levantó hasta bien adentrados en la A-8. Como ya he mencionado antes nos desviamos por la N-643 disfrutando un poco de curvas y del paisaje.



Llegados a Ribadeo nos dirigimos a la oficina de información para informarnos de las visitas a la Playa de las catedrales. Y sin perder tiempo nos dirigimos al lugar que no tiene perdida y que goza de aparcamiento para vehículos de cuatro ruedas. A nosotros nos da igual porque podemos aparcar en cualquier lado.
Una vez nos descalzamos y nos pusimos algo más cómodos nos adentramos en la playa y pudimos observar las maravillas que es capaz de realizar la naturaleza.
Es impresionante como el agua moldea la roca creando cuevas y arcos. Y las charcas que se forman para que los mayores y los niños se bañen.
Como ya dije antes, es un lugar de visita obligatoria.




Después de nuestro paseito por la playa nos volvimos de nuevo a Ribadeo, donde se notaba que estaban de fiesta por la cantidad de gente que había en la calle y sobre todo por los grupos folclóricos que hacían exhibiciones de bailes y música.



Aprovechamos la ocasión para visitar el pueblo paseando por sus calles,viendo sus edificios y llegando hasta el puerto, y sobre todo probando los productos autóctonos.









Después nos dirigimos a Foz por la N-634 hasta cambiarla por la N-642. En Foz fuimos en busca de información de la FINCA GALENA, pero para no variar llegamos tarde o temprano, según se mire, y la oficina de información estaba cerrada. Así que nos tomamos un café y nos aventuramos por nuestra cuenta tras buscar en el móvil la supuesta situación.


Nos enfundamos de nuevo los cascos y nos dirigimos hacia Burela tomando el desvío de Ferreira (LU-151), una carretera de doble sentido, estrecha y de firme regular. Pero merece la pena adentrarse en ella.


Luego tenéis que tomar la LU-160 en dirección a Alfoz y tendréis que estar pendientes del cartel que os indica Finca Galea.
La Fina Galea es uno de esos lugares que se conocen por el boca a boca y que merecen la pena visitar. Se trata de una finca que se usa tanto para recibir visitas como para realizar eventos tipos Bodas. Un lugar con un encanto especial.

Es un viejo molino de agua, que se usaba para moler trigo y que los dueños han adaptado el entorno a las visitas. Encontraremos ruedas movidas por el agua, arboles con formas extrañas y varios estanques con sus puentes y pasos.
















Otra cosa que llama la atención, cuando uno va paseando cerca de los estanques es la cantidad de ranas y de libélulas que uno puede ver.












Tras visitar la finca nos dirigimos por la LU-162 hasta tomar N-642 en dirección a Burela. Pasada Burela seguimos en dirección al Ferrol. Tomando posteriormente la AC-862, siempre en dirección al Ferrol hasta llegar al Hotel Marcial.
Durante el camino disfrutamos de las curvas y del paisaje de estas maravillosas carreteras, siendo el único inconveniente el tráfico lento de los autóctonos.



Día 5 Lugo - Portomartín - Samos - Meira

Nos levantamos con el miedo en el cuerpo por culpa del Telediaria, que dio lluvia. Pero por suerte salieron unos rayos de sol que nos animaron a montar las maletas y tomar rumbo a Lugo en vez de Finisterre.

Tomamos la AG-64 para evitar la pocas nubes y llegar lo antes posible a Lugo, pero a la altura de Vilalba, el tiempo nos acompañaba, decidimos desviarnos y tomamos la LU-541.
Una carretera con su encanto.


Llegados a Lugo nos dirigimos hacia el punto de información y desde allí, con mapa en mano, nos dirigimos en busca de su Catedral.


Desde la Catedral se podía acceder a la parte superior de la muralla que da la vuelta a todo el casco antiguo. Tras la foto de rigor en el muro, aprovechamos para charlas con los abuelillos locales y para hacernos una foto en la Puerta de Santiago. Por eso del Camino... jejeje.


Continuamos adentrándonos por el corazón de Lugo pasando por la Plaza de Santo Domindo, la Rua de San Marcos y la Plaza del Ferrol.




Una vez visitado Lugo nos dirigimos a Portomarín, un pueblo que nos recomendaron en la oficina de información.
Para llegar hay que tomar la LU-612, una carretera de doble sentido y que tiene un poco de todo, sobre todo casas impresionantes pegadas a la misma.
Llegados al pueblo coincidimos con un montón de peregrinos, que se encontraban haciendo el Camino de Santiago tanto a pie como en bicicleta.




 Disfrutado del ambiente del Camino de Santiago, tomamos dirección a Sarria para llegar al pueblo de Samos por la LU-633. Esta carretera tiene dos problemas grandes, un gran asfalto con curvas que invitan a subir un poco de vueltas la moto para disfrutar un poco y los peregrinos. Éste último problema es el que mejor nos viene para conducir con la cabeza y no con la muñeca. jejeje.


Samos se trata de un pequeño pueblo que merece la pena visitar por su Monasterio, la capilla mozarabe del Salvador y un pequeño paseo junto al rio.






Como la hora de llegada a Samos coincidió con el hambre, jejeje, aprovechamos y degustamos unos platillos en el Hostal Victoria.


Después de la matar el gusanillo, continuamos marcha por la LU-636 hacia Piedrafia do Cebreiro. Disfrutando del recorrido por las vistas.





Continuando desde Piedrafita hacia Meira por la N-VI nos desviamos en Becerreá para tomar la A-6 hasta el desvío de Meira donde cogimos la LU-710.
Meira es famoso por el nacimiento del Rio Miño. Aprovechamos también para tomarnos allí un refrigerio y estirar un poco las piernas.





Realizada la vista al nacimiento volvimos a dirigirnos a la carretera, hacia Vilalba por la LU-120 y en Vilalba tomamos de nuevo la AG-64 porque el cielo estaba más negro que el sobaco de un grillo. Y efectivamente nos tuvimos que parar a mitad de camino para ponernos los chubasqueros.


Día 6 Finisterre - Muxia - Pontedeume

Día triste al levantarnos cuando nos asomamos por la ventana. Nubes y cielos grises. Decidimos darnos una vuelta por Xuvia y desayunar tranquilamente.





Pero al final nos liamos la manta a la cabeza y decidimos montarnos en la moto e ir en busca del Fin de la Tierra.
Tomamos la N-651 hasta tomar la N-VI que nos llevó a La Coruña. Donde nos liamos y volvimos a dar una vuelta por la Torre de Hercules. Y menuda vuelta. jajaja.
Bueno encontrándonos de nuevo nos dirigimos a Carballo por la AC-552 La cual no abandonamos casi hasta Finisterre. Donde un poco antes se puede tomar la AC-445.
¡Ciuidado con con la gente que sube andando hasta el Cabo de Finisterre!




Nos encontramos a una muchacha repartiendo folletos de un restaurante que nos hizo la boca agua con su paella con marisco.


Una vez llenada la panza nos dirigimos hacia Muxía, pero esta vez al llegar a Pereiriña tomamos una de esas carreteras que no tienen ni nombre pero que te introducen en la naturaleza.


Al llegar a Muxía nos encontramos un pueblo que estaba preparando las fiestas, ya que nos encontramos con la carpa del circo nada más entrar en él. Además nos encontramos con una playita que invitaba a darse un chapuzón.












Salimos de Muxía por la AC-440 hasta Berdoias hasta volver a tomar la AC-522 de vuelta hacia La Coruña.
Una vez pasado La Coruña y antes de legar al Ferrol, por la N-651 llegamos a Pontedeume, un pequeño pueblo pero que es muy transitado, por varios motivos.

- Primero: porque es el paso obligatorio para ir del Ferrol a La Coruña por la Nacional,
- Segundo: por su puente y por tener un montón de bares, además de una Torreón y una iglesia muy bonita.
- Tercero: porque es la entrada a las Fragas de Eume, un entorno natural precioso en el que merece la pena perderse durante un día entero. Además si continúas por esa carretera llegas al Monasterio de San Juan de Caaveiro.






Y por fin y dando gracias por el día tan bueno que nos hizo, nos volvimos al hotel para preparar las maletas y comenzar la segunda parte del viaje.

Día 7 Pontevedra - Poio - Combarro

Salimos directamente con los chubasqueros puestos ya que el día se levantó con lluvia, la cual no nos abandonó hasta llegar hasta el hotel en Poio.


Salimos de Xuvia por la Autovía en dirección a La Coruña para tomar posteriormente la N-651 dirección a Betanzos. Donde queríamos tomar la AC-542, pero no me preguntéis cómo pero aparecimos por Cambre y de allí nos dirigimos por carreteras autóctonas hasta Abegondo, donde por fin pudimos tomar la AC-542 hasta empalmar con la N-550 en dirección a Santiago de Compostela.
Una vez en Santiago seguimos las indicaciones a Pontevedra por la N-550, ya sin perdida. Sólo hay que seguir las indicaciones.

Llegados a Poio soltamos las maletas y nos pensamos el salir o no a seguir visitando según el planing. Pero como somos unos valientes y el agua no nos asusta, jajaja, nos volvimos a poner los chubasqueros y nos dirigimos al restaurante O REMO. Restaurante que nos recomendó una mujer muy simpática a la cual se estamos agradecidos por el sitio.








Y por fin dejó de llover. Salió el sol y nos dirigimos hacia Combarro, un pequeño pueblo costero que es muy curioso porque en sus callejuelas con casas de piedras y muchos horreos os encontrareis las tiendecillas con souvenirs de todo tipo y muchos bares donde el marisco y las empanadas se ven en todas las mesas.









Os recomendamos también que den una vuelta por el puerto de Combarros donde os ofrecerán dar una vuelta en barco con cata de marisco y bebida hasta no poder más, o por lo menos eso es lo que ofrecen. jejeje.



Desde Combarro nos volvimos a Pontevedra para seguir la visita. Una vez aparcada la moto nos adentramos en el casco antiguo.
La verdad es que el mapa turístico es muy bueno porque te indica un recorrido que pasa por delante de todos los monumentos y casas que merecen la pena visitar.
Lo mejor de todo es que nos hizo una tarde estupenda para pasear y para sentarse en las terrazas de los bares de la ciudad.









Como en todo sitio, siempre se encuentran cosas curiosas que te llaman la atención, como por ejemplo la tienda del Gato con Botas en Conbarros, la tienda de Apu en Pontevedra o la forma curiosa de tender los vaqueros jajaja.













Día 8 Ribeira - Combados - O Grove - La Toja - Sanxenxo

Por fin un día con sol y buena temperatura. Salimos por la mañana después de desayunar en el hotel en dirección a Vilagarcía de Arousa, Tomamos la PO-531 y posteriormente la N-640. Una vez en Vilagarcía de Arousa seguimos hacia Catoira bordeando la costa.
Desde Catoira Cruzamos el puente donde veréis unos barcos vikingos, posteriormente accedimos a la AG-11 hasta llegar a Ribeira.


Ya en Riberia aparcamos la moto al lado de la oficina de turismo que se encuentra en el puerto. Desde allí nos calzamos las zapatillas y nos dimos un paseo por el casco urbano. Pero hay que reconocer que no hay mucho que ver. La muchacha de la oficina nos indicó que lo mejor era visitar el Parque Natural de la zona y visitar el Dolmen de Axeitos.



Pero siguiendo también sus indicaciones nos dirigimos a la localidad de Aguió donde os encontrareis un pequeño pueblo donde os encontrareis con un pequeño paseo con su puentecillo que os lleva a ver los mejillones agarrados en las rocas. Pero es una pena porque están la mayoría vacíos o muertos.




Después de ponernos los dientes largos nos volvimos a montar en la moto en dirección de Cambados. Pero esta vez tomamos la AG-11 hasta Rianxo, no peguntéis el por qué, pero se me metió en la cabeza meternos en Rianxo y porque además teníamos que repostar la moto. Pero yo y mi orientación lo que conseguimos es cruzarnos el pueblo continuar por la CP-3301. Pero tras preguntar a un lugareño por una gasolinera, éste amablemente y en gallego nos indicó que hasta Catoira no había ninguna.

Una vez repostados nos continuamos el viaje bordeando la costa, volviendo a pasar por Vilagarcía de Arousa, continuamos por la PO-549 hasta llegar por fin a Cambados. Un pequeño pueblo que está dividido en tres zonas, según nos dijo la encargada de la oficina de turismo y que pudimos comprobar.
Hay una zona donde te encontrarás los bares de tapas, otra con las tiendas y luego una última con cas casas de los pescadores y con acceso a la torre.








Ya que nos encontrábamos en la zona de "papear" jejeje pues hicimos lo propio,





 Una vez visitado Combados nos dirigimos a la Peninsula de O Grove por la PO-550. Llegamos hasta el Puerto y desde allí nos dimos un paseo por el pueblo, pero más de lo mismo. La zona que merece la pena visitar es la parte de las casas de los pescadores y la parte de San Vicente que es la parte izquierda de la Peninsula.




Aprovechamos y cruzamos el puente que lleva a la Isla de la Toja, donde os encontrareis a un montón de abuelillas vendiendo pulseras de conchas y la Iglesia que está recubierta por conchas de vieiras.




Volviendo hacia el Hotel bordeando la costa nos paramos en Sanxenxo, para tomar un pequeño refrigerio y disfrutar del fresquito sentado en la terraza de un bar del puerto. Pero por el camino nos encontramos con una pequeña ermita y unas vistas maravillosas.







Pero poco antes de llegar al hotel, la curiosidad del Gato se apoderó de nosotros y al ver el cartel del Monasterio de Poio nos dirigimos en esa dirección


Y por fin en la habitación del hotel para descansar y emprender otro día.


Día 9 Santiago de Compostela - Playa

Nos levantamos con la ilusión de un peregrino andante, pero en moto jejeje. El día acompaña para poder disfrutar de un magnífico paseo por las calles de Santiago. Pero para no variar yo me invento los itinerarios y en vez de tomar directamente la N-550, me adentré en la PO-531 dirección a Vilagarcia de Arousa creyendo que iba a poder llegar a Barro. Pero tras meterme en una especie de polígono industrial abandonado me dí media vuelta hacia Pontevedra y me desvié en una rotonda que me llevó directamente a la N-550, donde posteriormente cogimos dirección Santiago.

Nada más llegar lo primero con lo que nos encontramos es con la Plaza de Obradoiro y la majestuosa Catedral.
Y el ambiente de unos andaluces jaleosos que celebran haber llegado por fin a su destino.




Después nos adentramos en busca de la Oficina de turismo para solicitar un mapa de la ciudad. El cual viene de maravilla porque te viene indicada una ruta con la que visitas todos los monumentos más destacados.


Durante el camino nos entro hambre y nos paramos a coger fuerzas.


Con nuestro mapa en mano y sabiendo lo que veíamos seguimos asombrándonos de la cantidad de gente que visita Santiago y lo bonita que es la ciudad.












Llegó la hora de comer y nos paramos en uno de los bares de la zona, pero cuidado porque no todo es oro lo que reluce. En este caso el menú no es de lo mejorcito que os hemos enseñado.




Y antes de despedirnos de Santiago de Compostela nos pasamos por un parque. Y os aviso. Cuidado con las abuelillas. 


De camino al hotel nos encontramos una cosa curiosa y que se la dedicamos a nuestro amigo Agustín del bar Tingua`s en Carlos III (Córdoba). El entenderá la foto.



Y como el día estaba tan bueno nos cambiamos, nos pusimos los bañadores y nos fuimos a la playa. Porque no nos podíamos ir sin probar el agua de Galicia.



Y tras un día de monumentos y playa, por fin regresamos al hotel, nos tomamos un refresco en el bar y una ducha para hacer cuerpo para el día siguiente.

Día 10 Vigo - Tui - Baiona - Bueu

Buenos días nos levantamos y desayunamos nuestras tan deseadas tostadas de pan tostado y no a la plancha. Nos montamos en la moto y nos dirigimos en dirección a Vigo por la N-550, pero continuamos hasta Tui. Informo que tomamos un tramo de la A-55 por despiste.



En Tui nos dirigimos en busca de la Oficina de Turismo, la cual está junto a la Catedral. Lugar que merece la pena visitar.


A posteriori nos dirigimos hacia el puente Internacional que divide España de Portugal. Así que si no llega a ser por el cartel no sabríamos donde estaríamos. jejeje.


Una vez regresados a España, nos acercamos al Parador que se encuentra antes de llegar al paseo que hay junto al Rio Miño. Donde se encontraban preparando una prueba deportiva. Pero yo me fijé en las empanadas que estaban sacando de una furgoneta. Ummmm que ricas.













Continuamos visitando más rincones de Tui antes de partir hacia Baiona.




Desde Tui tomamos la PO-340 hasta llegar a Baiona. Durante el camino nos encontramos con el mercadillo de uno de los pueblos de paso


En Baiona aparcamos en la misma puerta del Parador, que en este caso el Parador está dentro de una muralla donde hay que pagar un euro para entrar que te descuentan si consumes en el Parador. El acceso te da para entrar a ver la fortaleza que hay.


Una vez aparcada la moto nos dirigimos a visitar la parte turística del pueblo, encontrándonos con varias iglesias y con numerosos bares y restaurantes. También se puede visitar una réplica de una de las carabelas con las que Colón descubrió las Américas.





 Descubrimos que las gaviotas campan a sus anchas por todos los pueblos costeros y lo mejor de todo fué la casa de Brutus, el enemigo de Popeye


 Y como tanto visitar da sed, nos paramos en uno de los múltiples bares del pueblo donde nos obsequiaron con una tapa de orejas.



Llegada la hora de la comida nos dirigimos hacia Bueu, donde nos recomendaron que se come muy buen marisco a buen precio.
Una vez salimos de Baiona por la PO-552 hacia Pontevedra, a la altura de Redondela se convierte en la N-550. Algunos kilómetros después nos desviamos hacia la N-554 dirección a Cangas. Pero antes de llegar a Cangas hay un desvío que te indica Bueu.







El recorrido es una maravilla, ya que vas bordeando toda la Ría, pero lo malo es que hay pocos sitios para adelantar y la gente va de paseo, y cuando me refiero a paseo es a velocidades muy por debajo de la marcada por la vía.

Una vez llegados a Bueu coincidimos con una concentración de Motos, pero como toda concentración hay gente que merece la pena y descerebrados que se ponen a hacer el ji...as haciendo caballitos en una calle donde puede cruzarse cualquier persona o cosa.

Bueno siguiendo con la búsqueda del famoso restaurante del Marisco, creo que no tuvimos mucha suerte, ya que o una de dos, o no dimos con el que era o no era tan barato para nosotros.
El lugar donde comimos se llama el Restaurante "La Centoleira", pero que no se encuentra en Bueu, sino junto al puerto de Beluso.
Con decir que el kilo de Camarones estaba a 110 euros, y la mariscada para una persona a 58 euros, habiéndola visto en otros sitios de Galicia al mismo precio para dos personas.
Pero hay que reconocer que la paella de marisco merece la pena  por la cantidad y el sabor. Así que todo es probar por si os gusta.


Terminamos de comer a las 18:00 h y nos dirigimos hacia Vigo para tomar un café y visitar la ciudad de la Rianxeira. Después de dar alguna vuelta nos paramos en la Rua Urzaiz y nos adentramos en busca del centro andando.


Nos metimos en la zona comercial antes de llegar al puerto en busca de la oficina de turismo para pedir un mapa.



 


Una vez llegados al Puerto, nos encontramos con una competición de X-Games, donde competían con BMX y con Monopatines. Encontrándonos con toda clase de gente. Pero lo que no encontramos abierta era ninguna de las dos oficinas de turismo.
Nos acercamos a un autobús de los que te enseñan la ciudad y allí nos dieron un mapa. Y tras preguntar por las cosas más turísticas nos indicaron que el Parque do Castro andando era algo cansado. Pero como aventureros que somos, jejeje, que esté a 150 m por encima del mar no nos da miedo y nos fuimos en busca de él.




Desde arriba hay unas vistas muy bonitas de todo Vigo, además se trata de un parque donde encontrareis con una fortaleza y el monumento a los Galeones de Rande.

Y por fin llegó la hora de la vuelta al hotel, que después de un día de calor y sol apetecía ya tomar una ducha fresquita para relajar el cuerpo y la mente.

El camino de vuelta lo hicimos por la N-550 hacia Pontevedra, el cual se nos hizo corto por la distancia y sobre todo porque ver las Rías anocheciendo.

Nos despedimos hasta mañana, que será el último día de visita en Galicia.

Día 11 Orense - Allaniz

Después de una muy mala noche a causa de unos borregos que se tiraron hasta las 03:20 h en la terraza del bar que da debajo de la habitación que teníamos, y tras bajar a hablar con el recepcionista para que pusiera orden. Cosa que fué para nada ya que con una sonrisa bobalicona me contestó "Que como hace calor pues tenemos la ventanas abiertas y por eso se oye el ruido de la gente". Tócate los ... así que la culpa es nuestra por no querer pasar calor.
Pero lo mejor de todo es que a las 07:30 h ya estaban otra vez pegando berrido y con el mismo energúmeno de recepcionista que les permite hacer ruido.

Bueno después de dar nuestras respectivas quejas a las otras encargadas del hotel, personas que parecían más educadas, nos montamos en la moto y nos dirigimos hacia Orense por la N-541. Al llegar a Orense nos encontramos con un Tren con muchas flores y velas. Suponemos que es por lo ocurrido con el AVE.


Tras el tren nos adentramos en la ciudad y logramos aparcar teniendo como referencia una estatua de un coche de rally.


Una vez aparcados nos dirigimos andando hacia el centro, encontrándonos con una multitud de plazas e iglesias, junto a la catedral. Visita obligada para todo turista.






 Lo que nos llamó la atención fué la poca gente que había por la calle a pesar de ser domingo, y sobre todo que la mayoría de los bares y comercios turísticos también lo estaban.
Otra cosa que hay que visitar son las termas que hay en la calle abiertas al publico y que se ven desde fuera.


Lo mejor de todo es que nos encontramos a los Fraggle Rock.


Como la visita a Orense fué rápida nos dirigimos a Allaniz, un pueblo que nos recomendaron varias personas. Pero que no pensábamos que tuviera ese encanto.

 Nada más entrar al pueblo nos encontramos con un río de agua oscura, a causa del fondo.


Como llegamos a la hora de comer, tras informarnos de lo más importante para visitar y recoger un mapa, nos dirigimos a un restaurante con encanto que se encuentra junto al río.













La verdad que además del entorno la comida estaba muy buena, es cierto que la carta es un poco corta, pero la calidad es muy buena. Además nos obsequiaron con unos menjunjes de la zona jejeje.





Una vez el estómago lleno la cosa se ve de otra forma, así que tomamos el mapa y nos adentramos en Allaniz. Un pueblo de piedra, donde lo más llamativo son las numerosas tiendas de ropa de marca que hay. A parte de algunas curiosidades.








Continuando el paseo nos encontramos con la piscina municipal, la cual se encuentra junto al río. Pero lo mejor de todo es que la gente se tumba en la hierba que hay en las orillas del mismo y se bañan en el. La verdad que la temperatura invitaba a ello y se nos puso los dientes largos.













Con el calor en el cuerpo y sin pensarlo dos veces nos montamos en la moto para volver al hotel y bañarnos en la piscina. Salimos del pueblo y tomamos la A-52 en dirección a Orense y posteriormente tomamos la salida de Santiago hasta que nos adentramos un tramo en la AG-53 que termina en O Carballiño donde continuamos por la N-525 hasta Pontevedra.

Día 12 Poio - Madrid

Tras abandonar el Hotel Paris, el cual recomiendo por su desayuno, ya que te ponen tostadas de pan tostado (y no a la plancha), y siempre y cuando os den una habitación que no estè encima del Bar, ya que para algunos de los encargados del hotel prima más el bienestar de unos descerebrados sin educación que la del resto de los huespedes.

La vuelta la hacemos por el camino más rápido y corto posible, ya que nuestra intención es evitar el calor de Madrid. Así que partimos a las 07:30 h saliendo por la N-541 hasta Carballiño donde tomamos la AG-53 que enlaza con la A-52 a la altura de Orense. La seguimos hasta llegar a Verín, pueblo de mi amigo Javi, donde paramos para desayunar.

Y abandonamos Galicia la tierra del marisco, las Rías y el albariño junto a otras cosas. La tierra que tiene una estatua en homenaje a los turistas que han probado sus comidas.




Continuando con el viaje, seguimos hasta enlazar a la altura de de Benavente con la A-6 en dirección de Madrid, la cual abandonamos en Adanero para tomar la N-VI hasta volver a enlazar con la A-6, y de ahí hasta nuestra casita de Madrid.

Por la tarde quedamos con nuestros amigos Eva, Ernesto e Irene, que al principio del viaje no pudieron quedar con nosotros por un asuntito que ya os contamos en su día.





Día 13 Madrid - Córdoba (fin del viaje)

Nos levantamos por la mañana y quedamos con nuestros amigos Kiko, Noe y Nerea, los cuales visitamos en el viaje a Grecia pero sin la peque. Así que ya tocaba conocer a su niña.


Después de comer nos montamos de nuevo en la moto y nos dirigimos hacia Córdoba la llana, con su fresquito. Jajaja. La carretera, la de siempre la N-IV hasta llegar a casa.

Por fin dejaremos que descanse la moto y nuestros traseros, los cuales has sufrido un poco en estos días. Estas fotos son para mi amigo Sergio y decirle que ya mismo te alcanzo. Jajaja.




Y como dice David, el Gnomo "SLITZBEY", el GATO PIJI se despide hasta la próxima.



GATO PIJI EN ESTEPONA

 VACACIONES EN LA PLAYA Después de un comienzo de año diferente llegaron las vacaciones con un nuevo miembro en la familia del Gato Piji. Es...